Lección 4: PARÁBOLAS

Lección 04 
20 de julio - 26 de julio

Parábolas

Imagen del título semanal

Tarde de Sábado

Leer para el estudio de esta semana

Marcos 4:1-34 ; Santiago 1:21 ; Isaías 6:1-13 ; Salmos 104:12 ; Daniel 4:10-12 .

Texto de memoria:

“Y les dijo: Mirad lo que oís. Con la misma medida con que medís, se os medirá, y a los que oís, se os añadirá más. Porque a todo el que tiene, se le dará más; pero a todo el que no tiene, aun lo que tiene se le quitará” ( Marcos 4:24-25 ).

El estudio de esta semana se centra en las parábolas de Marcos 4:1-41 . El Evangelio de Marcos es el que tiene menos parábolas de todos los Evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas).

Durante muchos años los eruditos han discutido sobre el significado y la interpretación de las parábolas de Jesús: cómo interpretar lo que significan, por qué Jesús las utilizó, qué tipo de lecciones pretendían revelar y cuán literalmente debían tomarse o si eran puramente alegorías, etcétera.

Obviamente no vamos a resolver todos estos problemas en la lección de esta semana. En cambio, los analizaremos y, por la gracia de Dios, lograremos comprender los puntos que Jesús planteó a través de estas parábolas.

Marcos 4:1-41 tiene sólo cinco parábolas: el sembrador, la lámpara, la medida, la semilla que crece y la semilla de mostaza. La mayor parte del capítulo gira en torno a la parábola del sembrador. Esta parábola se cuenta primero, seguida por el motivo de las parábolas y luego por la interpretación de la parábola. Este patrón de tres pasos será el foco de los estudios del domingo, lunes y martes. Luego, las otras parábolas serán el tema de estudio del miércoles y jueves.

*Estudie la lección de esta semana para prepararse para el sábado 27 de julio.


Comentarios Elena G.W

Para su propio sabio propósito, el Señor velaba las verdades espirituales con figuras y símbolos. Mediante el uso de figuras de lenguaje, daba a menudo a sus acusadores y enemigos la reprensión más sencilla y efectiva, y ellos no podían encontrar en sus palabras ninguna ocasión para condenarlo. Por medio de parábolas y comparaciones, encontró el mejor método de comunicar la verdad divina. En un idioma sencillo, usando figuras e ilustraciones sacadas del mundo natural, abría la verdad espiritual a sus oyentes y daba expresión a hermosos principios, que pudieran haber pasado por sus mentes, y apenas dejado un rastro, si él no hubiera conectado sus palabras, con escenas conmovedoras de la vida, la experiencia, o la naturaleza. De esta manera despertaba su interés, promovía un espíritu de investigación, y cuando tenía su atención asegurada, decididamente impresionaba en ellos, el testimonio de la verdad. Así podía impresionar debidamente el corazón, para que en el futuro, sus oyentes pudieran mirar las cosas que él había relacionado con la lección, y recordar las palabras del divino Maestro (La voz: su educación y uso correcto, pp. 119, 120).

Tan amplia era la visión que Cristo tenía de la verdad, tan vasta su enseñanza, que cada aspecto de la naturaleza era empleado en ilustrar la verdad. Las escenas sobre las cuales la vista reposaba diariamente, se hallaban relacionadas con alguna verdad espiritual, de manera que la naturaleza se halla vestida con las parábolas del Maestro.

En la primera parte de su ministerio, Cristo había hablado a la gente en palabras tan claras, que todos sus oyentes podían haber entendido las verdades que los hubieran hecho sabios para la salvación. Pero en muchos corazones la verdad no había echado raíces y había sido prestamente arrancada. “Por eso les hablo en parábolas —dijo él—, porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden… Porque el corazón de este pueblo está engrosado, y de los oídos oyen pesadamente, y de sus ojos guiñan”. Mateo 13:13-15 (Palabras de vida del gran Maestro, p. 20).

Cristo tenía verdades para presentar, que la gente no estaba preparada para aceptar, ni aun para entender. Por esta razón también él les enseñó en parábolas. Relacionando sus enseñanzas con las escenas de la vida, la experiencia o la naturaleza, cautivaba su atención e impresionaba sus corazones. Más tarde, cuando ellos miraban los objetos que ilustraban sus lecciones, recordaban las palabras del divino Maestro. Para las mentes abiertas al Espíritu Santo, el significado de la enseñanza del Salvador se desarrollaba más y más. Los misterios se aclaraban, y aquello que había sido difícil de entender se tornaba evidente.

Jesús buscaba un camino hacia cada corazón. Usando una variedad de ilustraciones, no solamente presentaba la verdad en sus diferentes fases, sino que hablaba al corazón de los distintos oidores. Suscitaba su atención mediante figuras sacadas de las cosas que los rodeaban en la vida diaria. Nadie que escuchara al Salvador podía sentirse descuidado u olvidado. El más humilde, el más pecador, oía en sus enseñanzas una voz que le hablaba con simpatía y ternura (Palabras de vida del gran Maestro, p. 11).
Domingo
21 de julio

La parábola del sembrador

Lee Marcos 4:1-9 . ¿Cómo son los distintos tipos de suelo y qué sucede con las semillas que caen en ellos?
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Al leer las parábolas de Jesús en los Evangelios, la gente suele querer pasar rápidamente a la interpretación. Después de todo, ¿no es ese el objetivo de estas historias: enseñar alguna verdad espiritual para la vida cristiana? Sí, pero a veces, salvo en breves comentarios como “El reino de Dios es semejante” o “El que tenga oídos para oír, que oiga”, Jesús no explica la parábola.

Por lo tanto, es bueno reducir la velocidad y simplemente analizar la historia en sí para captar la dirección que apuntan sus diversas características narrativas. Hacer esto con la parábola del sembrador produce una variedad de ideas. La semilla es la misma en cada caso, pero cae en cuatro tipos diferentes de suelo. El tipo de suelo influye en gran medida en el resultado de la semilla. En lugar de una historia continua, la parábola es en realidad cuatro historias individuales contadas hasta su finalización en cada escenario. El tiempo necesario para completar la historia se alarga con cada historia sucesiva.

La semilla que cae en el camino es comida inmediatamente por los pájaros. “Y sucedió que al sembrar, una parte cayó junto al camino; y vinieron las aves del cielo y la comieron” ( Marcos 4:4 ).

La semilla que cae en suelo rocoso tarda unos días o semanas en alcanzar su resultado fallido, que incluye ser quemada por el sol.

La semilla que cae en el suelo lleno de maleza tarda aún más tiempo en llegar a su destino improductivo, ahogada como está por las espinas.

La semilla que cae en buena tierra es la que tarda más que todas, probablemente una temporada entera de crecimiento, como es el patrón normal para un cultivo.

Tres de las historias tratan sobre el fracaso; sólo la última trata sobre el éxito, una cosecha abundante y buena. La extensión de las historias, el período cada vez más largo de cada historia sucesiva y el hecho de que sólo una historia trate sobre el éxito, todo apunta al riesgo de fracaso pero al resultado abundante del éxito.

La parábola parece señalar el costo del discipulado y los riesgos que implica, pero también resalta la abundante recompensa de seguir a Jesús.

¿Cuáles son otras lecciones espirituales que podemos aprender de la naturaleza?
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Comentarios Elena G.W
La misión de Cristo no fue entendida por la gente de su tiempo. La forma de su venida no era la que ellos esperaban. El Señor Jesús era el fundamento de todo el sistema judaico. Su imponente ritual era divinamente ordenado. El propósito de él era enseñar a la gente que al tiempo prefijado vendría Aquel a quien señalaban esas ceremonias. Pero los judíos habían exaltado las formas y las ceremonias, y habían perdido de vista su objeto. Las tradiciones, las máximas y los estatutos de los hombres ocultaron de su vista las lecciones que Dios se proponía transmitirles. Esas máximas y tradiciones llegaron a ser un obstáculo para la comprensión y práctica de la religión verdadera. Y cuando vino la Realidad, en la persona de Cristo, no reconocieron en él el cumplimiento de todos sus símbolos, la sustancia de todas sus sombras…

El evangelio de Cristo era un tropezadero para ellos porque demandaban señales en vez de un Salvador. Esperaban que el Mesías probase sus aseveraciones por poderosos actos de conquista, para establecer su imperio sobre las ruinas de los imperios terrenales. Cristo contestó a esta expectativa con la parábola del sembrador. No por la fuerza de las armas, no por violentas interposiciones había de prevalecer el reino de Dios, sino por la implantación de un nuevo principio en el corazón de los hombres (Palabras de vida del gran Maestro, pp. 17, 18).

Por medio de la parábola del sembrador, Cristo ilustra las cosas del reino de los cielos, y la obra que el gran Labrador hace por su pueblo. A semejanza de uno que siembra en el campo, él vino a esparcir los granos celestiales de la verdad. Y su misma enseñanza en parábolas era la simiente con la cual fueron sembradas las más preciosas verdades de su gracia. A causa de su simplicidad, la parábola del sembrador no ha sido valorada como debiera haber sido. De la semilla natural echada en el terreno, Cristo desea guiar nuestras mentes a la semilla del evangelio, cuya siembra produce el retorno de los hombres a su lealtad a Dios. Aquel que dio la parábola de la semillita es el Soberano del cielo, y las mismas leyes que gobiernan la siembra de la semilla terrenal, rigen la siembra de la simiente de verdad (Palabras de vida del gran Maestro, p. 16).

La naturaleza, juntamente con la Biblia, debe ser nuestro gran libro de texto… Cuando se siembra la semilla y se cultiva las plantas, debemos recordar que Dios creó la semilla y la da a la tierra. Mediante su poder divino se preocupa de esa semilla. Es por su mandato que la semilla al morir, da su vida al tallo y a la espiga con sus propias semillas, las cuales se guardan para sembrarlas y obtener una nueva cosecha. Debemos estudiar, además, nuestra participación en este proceso. El agente humano tiene su parte que realizar, su obra que hacer. Esta es una de las lecciones que la naturaleza enseña y percibiremos en ella una obra solemne y hermosa (Testimonios para la iglesia, t. 6, p. 189).
Lunes
22 de julio

La interpretación de Jesús

Jesús terminó con la parábola y no dio ninguna explicación inmediata. Según el texto ( Marcos 4:1 ), Jesús la pronunció ante “una gran multitud”. Sólo más tarde, ante un grupo más pequeño ( Marcos 4:10 ), explicó lo que significaba la parábola.

Lee Marcos 4:13-20 . ¿Cómo interpretó Jesús la parábola del sembrador?
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Jesús interpreta la parábola identificando los elementos externos a la historia que representan varios de los detalles de la misma. La interpretación indica que la historia es una alegoría vaga con referencias al mundo real, no necesariamente una referencia a cada detalle.

Jesús identifica la semilla como “la palabra”. Esto se referiría a la Palabra de Dios, particularmente como la predicó Jesús. Santiago 1:21 dice: “Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas” (RVR1960).

Los diferentes tipos de suelos son diferentes tipos de oyentes. En la interpretación de Jesús, todos escuchan la Palabra; es decir, todos los tipos de suelo tienen semillas sembradas en ellos. Pero la recepción es diferente. El suelo del camino es duro y los pájaros arrebatan la semilla. Jesús relaciona esto con el hecho de que Satanás se lleva la verdad. El suelo rocoso tiene poca profundidad. Jesús relaciona esto con las personas con compromisos superficiales; no han calculado el costo del discipulado. El suelo lleno de maleza ahoga la semilla sembrada en él. Jesús explica que esto representa las preocupaciones de la vida y las riquezas que ahogan la Palabra. Pero el buen suelo representa a los que escuchan la Palabra y la reciben para que crezca y produzca una cosecha abundante.

Las explicaciones más largas son las del terreno pedregoso y del terreno lleno de maleza. Al describir a los oyentes del terreno pedregoso, Jesús señala elementos contrastantes: reciben la Palabra con alegría, pero son discípulos temporales. Cuando llega la persecución, se apartan. Los oyentes del terreno lleno de maleza son un contraste. No se apartan por los tiempos difíciles, sino por los buenos tiempos; su enfoque está en las cosas del mundo en lugar del reino de Dios. Sus preocupaciones y preocupaciones giran en torno a lo que el mundo tiene para ofrecer.

Piensa en tu propia vida. ¿Se están infiltrando en tu experiencia algunas características del camino, del terreno rocoso o del terreno lleno de maleza? Esto podría suceder de forma más sutil de lo que te das cuenta. ¿Qué opción puedes tomar para cambiar, si es necesario?
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Comentarios Elena G.W

Aquello a lo cual se refiere principalmente la parábola del sembrador es el efecto producido en el crecimiento de la semilla por el suelo en el cual se echa. Mediante esta parábola Cristo decía prácticamente a sus oyentes: No es seguro para vosotros deteneros y criticar mis obras o albergar desengaño, porque ellas no satisfacen vuestras ideas. El asunto de mayor importancia para vosotros es: ¿cómo trataréis mi mensaje? De vuestra aceptación o rechazamiento de él, depende vuestro destino eterno (Palabras de vida del gran Maestro, p. 25).

A través de la parábola del sembrador, Cristo presenta el hecho de que los diferentes resultados dependen del terreno. En todos los casos, el sembrador y la semilla son los mismos. Así él enseña que si la palabra de Dios deja de cumplir su obra en nuestro corazón y en nuestra vida, la razón estriba en nosotros mismos. Pero el resultado no se halla fuera de nuestro dominio. En verdad, nosotros no podemos cambiarnos a nosotros mismos; pero tenemos la facultad de elegir y de determinar qué llegaremos a ser. Los oyentes representados por la vera del camino, el terreno pedregoso y el de espinas, no necesitan permanecer en esa condición. El Espíritu de Dios está siempre tratando de romper el hechizo de la infatuación que mantiene a los hombres absortos en las cosas mundanas, y de despertar el deseo de poseer el tesoro imperecedero. Es resistiendo a! Espíritu como los hombres llegan a desatender y descuidar la palabra de Dios. Ellos mismos son responsables de la dureza de corazón que impide que la buena simiente eche raíces, y de los malos crecimientos que detienen su desarrollo.

Debe cultivarse el jardín del corazón. Debe abrirse el terreno por medio de un profundo arrepentimiento del pecado. Deben desarraigarse las satánicas plantas venenosas. Una vez que el terreno ha estado cubierto por las espinas, solo se lo puede utilizar después de un trabajo diligente. Así también, solo se pueden vencer las malas tendencias del corazón humano por medio de esfuerzos fervientes en el nombre de Jesús y con su poder… Dios desea hacer en favor nuestro esta obra, y nos pide que cooperemos con él (Palabras de vida del gran Maestro, pp. 36, 37).

No debemos permitir que las cosas de este mundo absorban de tal manera la atención que la mente y el cuerpo queden completamente monopolizados. Así se priva a quienes nos rodean de las palabras amables y de las obras que los ayudarían en la ascensión del camino. El canal de la luz está obstruido por los intereses mundanos. La gracia que Cristo anhela impartir, no puede derramarla. Muchos llegan a tener cada vez menos fuerza para impartir a otros, porque no reciben poder de la Fuente de todo poder. Dios los invita a separarse de las cosas que corroen la mente y contaminan la experiencia religiosa.

Todos están apremiados por preocupaciones urgentes, cargas y deberes. Pero, cuanto mayor sea la presión que se ejerce sobre vosotros, cuanto más pesadas sean las cargas que debéis llevar, tanto mayor es vuestra necesidad de ayuda divina. Jesús será vuestro ayudador. Necesitáis constantemente la luz de la vida para aliviar vuestro camino, y entonces sus rayos divinos se reflejarán sobre otros (Nuestra elevada vocación, p. 282).
Martes
23 de julio

La razón de las parábolas

Lee Marcos 4:10-12 . ¿Por qué Jesús enseñaba en parábolas?
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Una lectura superficial de estos versículos da la impresión de que Jesús enseñó en parábolas para mantener a los de afuera en la oscuridad. Pero tal perspectiva no encaja con las acciones de Jesús en otras partes de Marcos. En Marcos 3:5-6 , Jesús se entristece por la dureza de corazón de los líderes religiosos. En Marcos 3:22-30 , Jesús toma en serio los argumentos de los escribas y explica en detalle por qué están equivocados. En Marcos 12:1-12 , los líderes religiosos entienden que la parábola de Jesús de los labradores se refiere a ellos. En realidad es una advertencia de hacia dónde se dirige su complot contra Él y las terribles consecuencias que se derivarán. Si no se preocupara por ellos, no les advertiría. En consecuencia, las palabras de Jesús aquí en Marcos 4:1-41 necesitan una mirada más atenta para reconocer cuál es Su punto. Jesús está parafraseando Isaías 6:9-10 .

Lee Isaías 6:1-13 . ¿Qué le sucede a Isaías aquí y cuál es el mensaje que se le encomienda llevar a Israel?
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Isaías ve una visión de Dios en el templo y se siente abrumado por la gloria de Dios y su propia inmundicia. Dios lo purifica y le da un mensaje impactante. Al igual que en Marcos, suena fuera de sintonía con el resto de Isaías, donde hay mucho consuelo para el pueblo de Dios.

En Isaías 6:1-13 el mensaje tiene como objetivo sacudir al pueblo para que despierte y se aparte de sus malos caminos. En Marcos la clave para entender las palabras de Jesús se encuentra en Marcos 3:35 . Para entender las palabras y enseñanzas de Jesús, uno debe hacer la voluntad de Dios ( Marcos 3:35 ). Esto lleva a esa persona a la familia de Jesús. Aquellos que ya han decidido que Jesús está poseído por el diablo no lo escucharán.

El punto de la cita de Jesús de Isaías 6:1-13 no es que Dios esté dejando a la gente afuera, sino que sus propias ideas preconcebidas y dureza de corazón les impiden aceptar la verdad salvadora.

Esta verdad es el concepto general de la parábola del sembrador. Cada uno elige qué tipo de tierra quiere ser. Todos deciden por sí mismos si se entregan o no a Jesús. Al final, cada uno elige.


Comentarios Elena G.W

Jesús quiso incitar el espíritu de investigación. Trató de despertar a los descuidados, e imprimir la verdad en el corazón. La enseñanza en parábolas era popular, y suscitaba el respeto y la atención, no solamente de los judíos, sino de la gente de otras nacionalidades. No podía él haber empleado un método de instrucción más eficaz. Si sus oyentes hubieran anhelado un conocimiento de las cosas divinas habrían podido entender sus palabras; porque él siempre estaba dispuesto a explicarlas a los investigadores sinceros (Palabras de vida del gran Maestro, p. 11).

Cristo dio a entender a sus discípulos que predicaba por medio de parábolas y escondía las grandes verdades que presentaba mediante expresiones figuradas, para que las personas que no tenían la verdad ni la amaban, aquellos cuyos corazones habían sido desviados por sus propios caracteres y su inclinación a la complacencia propia, no pudieran conocer sus doctrinas…

Nuestro Señor calificó a los oidores infructuosos como escépticos, superficiales o secularizados. Los tales no pueden percibir la gloria moral de la verdad, o su aplicación práctica y personal a sus propios corazones. Carecen de la fe que vence al mundo, y en consecuencia el mundo los vence a ellos (Cada día con Dios, p. 359).

Tenía [Jesús] otra razón para enseñar en parábolas. Entre las multitudes que se reunían a su alrededor había sacerdotes y rabinos, escribas y ancianos, herodianos y príncipes, hombres amantes del mundo, fanáticos, ambiciosos, que deseaban, sobre todas las cosas, encontrar alguna acusación contra él. Sus espías seguían sus pasos día tras día, para hallar alguna palabra de sus labios que pudiera causar su condena y acallar para siempre a Aquel que parecía arrastrar el mundo tras sí. El Salvador entendía el carácter de esos hombres, y presentaba la verdad de tal manera que ellos no pudieran hallar nada en virtud de lo cual presentar su caso ante el Sanedrín. En parábolas reprochaba la hipocresía y las obras malvadas de aquellos que ocupaban altas posiciones, y revestía de lenguaje figurado verdades tan cortantes que, si se las hubiera presentado en forma de denuncia directa, ellos no habrían escuchado sus palabras y bien pronto hubieran puesto fin a su ministerio. Pero mientras eludía a los espías, hacía la verdad tan clara que el error era puesto de manifiesto, y los hombres de corazón sincero aprovechaban sus lecciones. La sabiduría divina, la gracia infinita, eran aclaradas por los objetos de la creación de Dios. Por medio de la naturaleza y los incidentes de la vida, los hombres eran enseñados acerca de Dios. “Las cosas invisibles de él, su eterna potencia y divinidad, se echan de ver desde la creación del mundo, siendo entendidas por las cosas que son hechas”. Romanos 1:20.

En la enseñanza en parábolas usada por el Salvador se halla una indicación de lo que constituye la verdadera “educación superior”… En toda su enseñanza, Cristo puso la mente del hombre en contacto con la Mente infinita. No indujo a sus oyentes a estudiar las teorías de los hombres acerca de Dios, su Palabra o sus obras. Les enseñó a contemplarlo tal como se manifestaba en sus obras, en su Palabra y por sus providencias (Palabras de vida del gran Maestro, pp. 12, 13).
Miércoles
24 de julio

Lámpara y cesta de medición

Lea Marcos 4:21-23 . ¿Cuál es el énfasis especial que Jesús pone en la parábola de la lámpara?
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En aquella parte del mundo, en los días de Jesús, las casas variaban en tamaño y construcción, dependiendo de la ubicación y la riqueza. Las casas llegaron a seguir el modelo griego de estar construidas alrededor de un patio, pero con distintos niveles de sofisticación. O Jesús puede estar hablando de casas más pequeñas de campesinos. Casa grande o casa pequeña, la cuestión es este principio: un día se revelará la verdad sobre Jesús.

Jesús hace dos preguntas en Marcos 4:21 . La primera espera una respuesta negativa: “¿Acaso se trae la lámpara para ponerla debajo del almud o debajo de la cama?” La segunda pregunta espera una respuesta positiva: “¿Acaso se trae para ponerla en el candelero?” Jesús presenta un escenario absurdo, casi humorístico para demostrar su punto. Las lámparas son para dar luz, o de lo contrario pierden su propósito. Marcos 4:22 explica la parábola haciendo referencia a la idea de secretos que se hacen públicos. ¡Cualquiera cuyo correo electrónico o computadora haya sido hackeado entiende la posibilidad de que los secretos se hagan públicos! Pero de lo que Jesús está hablando es del evangelio.

Lee Marcos 4:24-25 . ¿Qué lección está transmitiendo Jesús con la parábola de la canasta de medir?
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En muchos lugares del mundo, los productos frescos se venden en mercados abiertos. Los vendedores suelen tener un dispositivo para medir el producto que venden. Es una práctica común de estos vendedores agregar un poco más a la venta para ayudar al comprador a sentir que está siendo tratado de manera justa. Jesús retoma el modo en que los buenos vendedores tratan a los compradores para enfatizar la importancia de la apertura a la verdad. Si uno está abierto y sigue la luz, obtendrá aún más. Pero si rechaza la luz, incluso lo que tenía antes le será quitado.

¿Cómo podemos entender mejor el principio de que con la misma medida con que medimos se nos medirá? Piense en ello en todas sus relaciones con los demás.
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Jueves
25 de julio

Parábolas del cultivo de semillas

Lea Marcos 4:26-29 . ¿Cuál es el enfoque principal de esta parábola?
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La mayor parte del Evangelio de Marcos tiene paralelos en Mateo o Lucas o en ambos. Pero ese no es el caso de esta parábola. Es exclusiva de Marcos. El enfoque de esta breve parábola es el proceso de crecimiento. Jesús indica que así es como funciona el reino de Dios. Los humanos tienen un papel que desempeñar, pero el verdadero crecimiento es obra de Dios. No es un proceso interminable. La historia llega a un final abrupto con la maduración del grano. De la misma manera, el regreso de Cristo por segunda vez pondrá fin de repente a la historia de nuestro mundo.

Lea Marcos 4:30-32 . ¿Cuál es el énfasis importante de la parábola de la semilla de mostaza?
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Esta parábola enfatiza cómo algo muy pequeño crece hasta convertirse en algo notablemente grande. Las semillas de mostaza miden típicamente de uno a dos milímetros de diámetro (0,039 a 0,079 pulgadas). La planta descrita aquí es probablemente la mostaza negra (Brassica nigra), que tiene semillas diminutas (más de 700 semillas en un gramo). Si bien no son las semillas más pequeñas del mundo, son bastante pequeñas, especialmente en comparación con la planta que producen, que puede crecer hasta tres metros (diez pies) de altura. Jesús señala que los pájaros incluso anidan en las ramas de la planta de mostaza. Esta última referencia es una alusión al Salmo 104:12 , con una alusión también a Daniel 4:10-12 . El Salmo 104:1-35 habla del poder de Dios en la creación del mundo, y Daniel 4:1-37 representa a Nabucodonosor como un gran árbol bajo el cual todo el mundo encuentra sombra y alimento.

El punto que Jesús plantea es que el reino de Dios, que comenzó siendo muy pequeño, se volverá grande e impresionante. La gente en los días de Jesús puede haber menospreciado al predicador itinerante polvoriento de Galilea con su grupo de discípulos, pero el tiempo ha demostrado que su reino de gracia continúa expandiéndose por todo el mundo.

“Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin” ( Mateo 24:14 ). Pensemos en cómo era la “iglesia” cuando Jesús hizo esa predicción. ¿Por qué es una predicción tan notable y que confirma la fe?
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Viernes
26 de julio

Pensamiento adicional

Lea Ellen G. White, “ 'El sembrador salió a sembrar' ”, págs. 33–61, en Palabras de vida del gran Maestro .

“La verdadera santidad es la integridad en el servicio a Dios. Esta es la condición de la verdadera vida cristiana. Cristo pide una consagración sin reservas, un servicio indiviso. Exige el corazón, la mente, el alma, la fuerza. No hay que valorar el yo. El que vive para sí mismo no es cristiano.

“El amor debe ser el principio de acción. El amor es el principio subyacente del gobierno de Dios en el cielo y en la tierra, y debe ser el fundamento del carácter del cristiano. Esto es lo único que puede hacerlo y mantenerlo firme. Esto es lo único que puede capacitarlo para resistir las pruebas y las tentaciones.

“Y el amor se revelará en el sacrificio. El plan de la redención fue establecido en el sacrificio, un sacrificio tan amplio, profundo y elevado que es inmensurable. Cristo lo dio todo por nosotros, y los que reciben a Cristo estarán dispuestos a sacrificarlo todo por amor a su Redentor. El pensamiento de su honor y gloria estará antes que cualquier otra cosa.”—Elena G. de White, Palabras de vida del gran Maestro , págs. 48, 49.

Preguntas de discusión


  1. “El amor debe ser el principio de acción. El amor es el principio subyacente del gobierno de Dios en el cielo y en la tierra”. ¿Cómo nos revela la cruz esta asombrosa verdad? ¿Cómo podemos reflejar esta clase de amor en nuestra vida? ¿Por qué debemos hacerlo?
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  2. ¿Cómo respondería usted a alguien que insistiera en que Jesús contaba parábolas para mantener a los de afuera en la oscuridad? ¿Por qué Jesús, quien murió por cada ser humano (ver 1 Juan 2:2 ), deliberadamente mantendría en la oscuridad a las personas por cuya salvación murió en la cruz?
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  3. La lámpara debe estar en el candelero, no debajo de un canasto ( Marcos 4:21 ). Aplique este principio al compromiso de su iglesia con su comunidad local. ¿Cómo puede elevar la luz a un nivel superior?
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  4. Consideremos la parábola de la semilla que crece ( Marcos 4:26-29 ). ¿Qué papel desempeñamos los seres humanos para ayudar a que la semilla del evangelio crezca, y qué papel desempeña Dios? Aunque obviamente desempeñamos un papel, ¿cómo podemos asegurarnos de que dependemos totalmente de Dios? ¿Podría ser esta actitud de dependencia total parte de lo que necesitamos hacer para crecer?
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Comentarios Elena G.W

Alza tus ojos, 16 de septiembre, “A cada hombre su tarea”, p. 271.

La maravillosa gracia de Dios, 6 de enero, “A diferencia de los reinos del mundo”, p. 14.

Parábolas – Plan de enseñanza

Pensamiento clave: Marcos 4 tiene cinco parábolas: el sembrador, la lámpara, la medida, la semilla que crece y la semilla de mostaza. La mayoría gira en torno a la parábola del sembrador.

1. Pida a un voluntario que lea Marcos 4:1-9 , 13-21 .

  1. Pídeles a los miembros de la clase que compartan una breve reflexión sobre cuál es el punto más importante de este pasaje.
  2. ¿Cómo son los diferentes suelos y qué pasa con las semillas que caen en ellos?
  3. Aplicación personal: Piensa en tus propias experiencias. ¿Hay algún camino, suelo rocoso o terreno lleno de maleza que se haya infiltrado en tu propia experiencia o que haya existido antes? Comparte tus pensamientos.
  4. Estudio de caso: Uno de sus familiares dice: “¿Cómo interpretó Jesús la parábola de la tierra? ¿Qué representaba cada una de las tierras? ¿Cómo se aplica a nuestro testimonio actual?” ¿Cómo le respondería a su familiar?

2. Pida a un voluntario que lea Marcos 4:10-12

  1. Pídeles a los miembros de la clase que compartan una idea sobre cuál es el punto más importante de este texto.
  2. ¿Por qué Jesús enseñaba en parábolas?
  3. Aplicación personal: ¿Cómo podemos reprender o reprender el pecado y aun así no mostrar falta de amor y respeto? ¿Cómo podemos amar al pecador y odiar el pecado? Comparte tu opinión.
  4. Caso práctico: Uno de tus amigos afirma: “Jesús enseñaba en parábolas para que las personas que no buscaban la verdad ni la gracia para la salvación no las entendieran y, por lo tanto, no tuvieran una manera de salvarse. Sus discípulos ni siquiera entendían algunas de ellas. Él tuvo que explicárselas a sus discípulos…” ¿Cómo le responderías a tu amigo?

3. Pida a un voluntario que lea Marcos 4:21-25 .

  1. Pídeles a los miembros de la clase que compartan una breve reflexión sobre cuál es el punto más importante de este texto.
  2. ¿Cuál es el énfasis de Jesús en la parábola de la lámpara?
  3. Aplicación personal: ¿Cómo puede su iglesia ser como una lámpara que se eleva más alto en la comunidad local? Comparta sus ideas.
  4. Estudio de caso: Uno de sus vecinos dice: “¿Qué está tratando de decir Jesús con respecto a la canasta de medir? ¿Cómo se relaciona eso con las personas a las que les estaba hablando? ¿Cómo se relaciona con nosotros?” ¿Cómo le respondería a su vecino?

4. Pida a un voluntario que lea Marcos 4:26-32 .

  1. Pídeles a los miembros de la clase que compartan una idea sobre cuál es el punto más importante de este texto.
  2. ¿Cuál es el enfoque principal de la parábola?
  3. Aplicación personal: ¿Cómo podemos ayudar a que la iglesia crezca para alcanzar a todo el mundo? Comparte tus ideas.
  4. Estudio de caso: Piense en una persona que necesite escuchar un mensaje de la lección de esta semana. Dígale a la clase qué planea hacer esta semana para compartir con ellos.

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